¡Ahí
está!...
frente a mí.
Inmenso,
majestuoso, azul,
me
llama...
Descalzo
mis pies
atravieso
la playa
ese
crujir de la arena seca
que
masajea mis pies.
Quema,
corro
me quito la ropa.
Voy
a la orilla.
¡Qué
atrevido!
Moja
mis pies.
Mis
manos cogen agua
a
la nuca, hombros
y sin pensarlo más
me
adentro en sus aguas
fresca,
suave, ligera.
Floto,
me sumerjo.
¡Esto
es vida!
Ada (23/07/17)